miércoles, 10 de octubre de 2012

España, no es por ti, es por mi...

Hay pocos términos tan difíciles de definir como lo es "nación".

¿Qué es una nación? ¿El nacionalismo es bueno o malo? ¿Que hace que un grupo de personas, asociadas a una tierra y una cultura, sean consideradas una nación?

 Empezaremos por la definición de la RAE:

nación. (Del lat. natĭo, -ōnis).
1. f. Conjunto de los habitantes de un país regido por el mismo gobierno.
2. f. Territorio de ese país.
3. f. Conjunto de personas de un mismo origen y que generalmente hablan un mismo idioma y tienen una tradición común.

En resumen, una nación es un conjunto de personas que conviven en un mismo territorio regido por el mismo gobierno y que comparten tradición e idioma. Parece que Cataluña encaja en la definición.

A estas alturas del post ya te habrás dado cuenta de por donde van los tiros. No es ni mucho menos la única región en la que hay movimientos independentistas, pero últimamente está siendo muy sonado en los medios. Tampoco es algo nuevo, el movimiento independentista tiene muchas décadas de historia.

Siempre me he preguntado quien/quienes tienen la "culpa" de esto. Los nacionalista que se quieren ir, los centralistas que les quieren hacer pasar por el aro, los dos... No lo tengo claro. Lo que si tengo como el agua es que ambas partes son responsables de la catalanofobia que emerge en algunas zonas de España. 

Cuando entro en este tema, siempre me acuerdo de unas declaraciones de Josep Lluís Carod Rovira (aquí y en la China Popular) en el programa "Tengo una pregunta para usted" en las que matenía que "El modelo plural de España hace tiempo que fracasó".  
Me hubiera encantado estar en ese plató para contestarle "Señor Carod, si el modelo plural de España ha fracasado es en parte por culpa de personas como usted". Y digo en parte, porque los que falsamente se denominan "patriotas españoles", esos que cuando oyen hablar catalán a un catalán se molestan y le ponen de hijo de p*** para arriba, también tienen una buena parte de culpa.

No seré yo quien defienda la independencia catalana, por ser un fascista madrileño centralista dirán algunos, pero creo que esto ya está llegando a un punto serio, a un punto en el que la única salida es dejar decidir a los que tienen potestad en ello. Eso sí, teniendo la participación de TODOS los catalanes. De nada vale el resultado de un referéndum en el que solo ha votado un 50% de los catalanes censados, y en los que gran parte de ellos serán los que siempre han sido partidarios de la autodeterminación. Es como poner un bar, beberte tú las cañas, y decir que el negocio es un éxito. Absurdo.

lunes, 1 de octubre de 2012

Vecinos

Vecinos, ese gran desconocido. Esas personas que conviven cerca de ti, a los que conoces desde hace tiempo, pero a los que no sabes si saludar o no, y donde hacerlo o donde no. Porque el caso es que no hay nada escrito sobre este tema. No hay un protocolo a seguir.

La situaciones que pueden producirse con un vecino son muy variadas, pero pueden resumirse en dos: cuando te encuentras a un vecino en el portal/rellano y cuando te lo encuentras por la calle.

Si te lo encuentras en tu portal, lo lógico y lo que tu mamá te enseñó, es que hay que ser educado y saludar. O bien esperar a que te salude él y devolverle el saludo. Ante la primera opción puede haber respuesta a tu "hola", puede no haberla, o puede que hagan el zafio intento de saludo que se queda en un "...la". Si esperas a la segunda opción, generalmente se produce una situación incómoda si el vecino está esperando lo mismo por tu parte.

Pero... ¿y si estás fuera del portal? ¿cuál es la distancia máxima a la que es obligatorio saludar? Porque si te pilla justo saliendo por la puerta de la calle, sí, pero ¿y si te pilla a, pongamos, unos 50 metros?¿y a 20? Es una de las grandes preguntas que el ser humano lleva haciéndose desde el principio de los tiempos. Seguro que alguna vez te has encontrado a un vecino, fuera de su hábitat vecinal habitual, y no has sabido si saludarle o no, o incluso te has hecho el sueco mirando al móvil para disimular.

Sin embargo hay un comportamiento más inquietante aún en este aspecto. Cuando estás en el portal, te cruzas a un completo desconocido y... ¡le saludas! No me dirás que no lo has hecho nunca. Me pregunto que tienen los portales vecinales que, por el simple hecho de estar en su interior, te hace saludar a cualquiera, a pesar de que no tienes ni idea de quien puede ser. A esta persona nunca la saludarías por la calle, pero en el portal ya... la cosa cambia Ya puede tratarse de un asesino, un violador o pero aún, uno del Círculo de Lectores, que tu vas y le brindas un generoso "hola".

El comportamiento humano, todo un misterio...